Cuando estudiaba pedagogía jamás imaginaba que en la práctica de la docencia nos enfrentaríamos a otra forma de enseñanza. 

La pandemia del COVID-19 afecto a la población mundial, reinventando formas de trabajo y adaptándose a las limitaciones que la enfermedad nos obligaba a seguir para combatir y aminorar el contagio. Esta afectación fue en todo tipo de industria y ámbitos. La educación fue una de ellas. 

Esta dolorosa experiencia que aún seguimos padeciendo nos sorprendió, pero también abrió el redescubrimiento de adaptarnos a las circunstancias adversas para no cesar en nuestra labor de enseñanza. 

El Colegio GAE tomo con responsabilidad el nuevo reto, con entusiasmo pero también con prudencia, conciencia y siguiendo con las indicaciones de nuestras autoridades educativas que la emergencia exigía, nos dimos a la tarea primero de salvaguardar la salud de los educandos y adaptarnos al sistema obligado a seguir. Clases en línea. 

Este sistema se tiene que ir adecuando y perfeccionando para una nueva contingencia. 

Estamos conscientes que la edad en los alumnos determina el modo, trato y forma de educación, pero siempre con el respeto y cariño que merecen nuestros niños. 

En el Colegio GAE sabemos del valor que representa la interacción presencial entre alumnos y profesores, sin embargo el Colegio continuó con el trabajo a distancia, haciendo uso de los recursos con que se cuentan adecuando estrategias para su correcto funcionamiento de enseñanza. Tanto los docentes como alumnos aprendimos a adaptarnos a los nuevos conceptos pedagógicos y modos de impartir la educación. En todo este proceso los padres han sido clave importante, formando una simbiosis para el beneficio de todos, esto los ha involucrado aún más con el día a día del aprendizaje de sus hijos y descubrir cómo interactúan sus niños con sus compañeros y profesores. Todo esto en conjunto nos ha ayudado para continuar con los contenidos y proyectos. 

En el Colegio GAE, existe el entusiasmo, profesionalismo, dedicación, tiempo y compromiso para ayudar a formar de cada unos de nuestros niños un mejor ser humano un mejor ciudadano y por ende un mejor país. México lo agradecerá.